Trekking para coronar La Sierra del Teleno (León)

El Pico Teleno, ascenso a la montaña sagrada de los astures

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Actualizado: 03/06/2025

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El suroeste de la provincia de León esconde un laberinto de colinas donde se halla uno de los referentes naturales de esta tribu celta. Si los griegos tenían su Monte Olimpo, los hindúes el Meru y los hawaianos el Mauna Kea. Los astures tenían el Pico Teleno. Vamos a coronarlo.

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Tilenus era una divinidad que los astures veneraban en este monte sagrado al que vamos a ascender. “Era el aspecto invernal viejo, guerrero y lunar del dios supremo del cielo, que era derrotado y sustituido por su hijo y hermano en su ciclo cósmico infinito. Más tarde los romanos asimilaron esa creencia convirtiéndolo en el dios Mars Tilenus. Numerosos petroglifos, santuarios y otros vestigios dan fe de ello”. Así lo informan desde la oficina de Turismo del Ayuntamiento de Truchas.

Collado florido en primavera en Pico Teleno.

En primavera el paisaje se tiñe de retamas florecidas.

Estamos en mitad del laberinto agreste que estruja el mapa del suroeste de la provincia de León y aísla la comarca de las Montañas de Teleno. “Este monte ha sido punto de referencia para los distintos pueblos que habitaron la zona, y objeto de numerosos mitos y leyendas”. Nos olvidamos de los Picos de Europa y de las Médulas para explorar uno de los territorios más codiciados por los romanos debido a sus entrañas de oro y donde los astures rendían culto a su dios más poderoso en su Olimpo particular: El Pico Teleno.

Un roadtrip por la antigua Asturia

El desafío son 2.188 metros y un trekking panorámico para coronar La Sierra del Teleno, que discurre de noroeste a sureste, sirviendo de límite natural entre las comarcas de La Cabrera, La Maragatería y El Bierzo. La de las Montañas de Teleno comprende 25 municipios a tiro de piedra de Astorga, La Bañeza y Ponferrada. “Esta ruta recorre algunos de los principales asentamientos e infraestructuras de las extracciones mineras practicadas por los romanos en el Teleno”, según nos informan sobre esta zona aurífera del noroeste de la península.

Torre de Peña Ramiro en Truchas.

Precisamente toda esa franja era el territorio de los astures, el pueblo de origen celta y precelta que habitaba casi la totalidad de Asturias, de las tierras de León y Zamora al oeste del río Esla además de la cara oriental de Lugo y Orense y parte del distrito portugués de Braganza. Hablamos de la antigua Asturia. Los griegos tenían su Monte Olimpo, los hindúes el Meru y los hawaianos el Mauna Kea. Los astures tenían el Pico Teleno, cuyo reto es coronarlo.

Nuestro punto de partida es la villa de Corporales, situada en el concejo de Truchas, al suroeste de León. Para llegar hasta aquí desde Madrid, conduciremos por la autopista A6 para tomar el desvío 303 hacia La Bañeza y continuar por la carretera LE-125 rumbo oeste hasta adentrarnos en la cordillera de los Montes de León. Seguimos el curso del río Eria dejando atrás pequeñas poblaciones como Castrocontrigo, Torneros de la Valdería, Quintanilla de Yuso o Truchas hasta llegar a Corporales. Esta localidad está situada a 1.220 metros de altitud y en mitad de un entramado montañoso por el que discurre la carretera del Morredero, hacia Ponferrada. No tardamos en llegar por ella a la confluencia del Arroyo de las Rubias con el Eria, donde cruzaremos el cauce por el Pontón del Arenal hasta contemplar el paraje conocido como La Majada Antigua de Mascariel. Este entorno guarda importantes restos arqueológicos que denotan un origen anterior a la época romana como los castros, antiguos poblados fortificados.

Vistas del valle desde la senda.

Nos olvidaremos del vehículo ahora para aparcarlo en la apacible pradera junto al arroyo donde se presentan algunos paneles explicativos de la riqueza biológica y arqueológica de esta zona de clima mediterráneo con influencia atlántica donde vuelan aves como el águila calzada, culebrera o real, además del aguilucho pálido, el halcón abejero y el peregrino. No es de extrañar que esté protegido como zona ZEPA y Lugar de Interés Comunitario (LIC). Otras señales nos animan a arrancar ya: “Pico Teleno”. El que, por fin, divisamos dominando la silueta ondulada de estos montes verdes cubiertos en su totalidad de matorral que ahora, en primavera, se presenta para el viajero como una postal idílica pintada de fucsia y de amarillo hasta donde alcanza la vista. “Las zonas más altas están cubiertas de pastizales y matorrales, y presentan algunos roquedos y canchales, en las laderas y las zonas bajas se encuentran algunas parameras y extensos bosques, principalmente pinares de repoblación y robledales”. Así describen las características botánicas de la Sierra del Teleno los expertos de la Confederación Hidrográfica del Duero.

Paisaje florecido en Pico Teleno de León

Las zonas más altas están cubiertas de pastizales y matorrales.

El capricho de los romanos más allá de las Médulas

Iniciamos la ruta de senderismo siguiendo el camino marcado que abandona la pradera para adentrarse en el matorral en un tramo con fuerte pendiente que recordará a muchos que esto, aunque fácil técnicamente, no es una broma. Los más agoreros hablarán de un “rompe piernas” con vistas espectaculares y los más optimistas, de un trekking moderado que hay que tomarse con calma. Sea como sea, es obligado venir preparado con agua suficiente para toda la ruta, al menos 2 litros, crema de sol, sombrero o gorra, calzado adecuado de montaña, una chaqueta por si hace frío en la cumbre y, preferentemente, pantalones largos para evitar quemaduras y posibles arañazos del brezo.

Senderista en el pedregal de Pico Teleno de León

Uno de los 'dos miles' más desconocidos del norte de España.

A medida que ganamos altura, el arroyo del Cabrito va desapareciendo y la forma del valle, de origen glaciar, se va estrechando progresivamente. Tras conquistar la primera subida en linea recta, alcanzamos un collado cubierto de flor donde nos topamos con una enorme peña plateada que rodearemos para tomar dirección norte y encontrar algunos gamos que no esperaban nuestra presencia. Pues el Monte Teleno es uno de los dos miles más desconocidos del norte peninsular. Desde esta pequeña llanura se pueden ver los canales trazados por los romanos para evacuar el agua desde la cima del Teleno y así poder filtrar la tierra y encontrar oro. Otro ejemplo son los depósitos de acumulación, conocidos como maseras, que evidencian los trabajos realizados a cielo abierto mediante técnicas de minería hidráulica en la zona. Hasta 75 yacimientos se reparten por unos 400 km².

Afloramientos de roca en Pico Teleno de León

Afloramientos de roca en las laderas de la pradera

Para conseguir coronar la cima hay que estar atento a los hitos marcados en el camino, pues en los días nublados es fácil extraviarse, especialmente en la zona alta del Teleno, donde desaparece todo rastro de naturaleza en favor de una dura y abrasadora pedrera. A esta accederemos por medio del canchal en su vertiente sur. Ya falta poco.

Los enigmas de la cumbre venerada por los celtas

Tras el último esfuerzo y ya en la meseta del Teleno, nos encontramos a más de 2.000 metros de altura donde aparece un vértice geodésico y donde se puede disfrutar de unas vistas privilegiadas de la Cabrera Alta al sur, los Montes Aquilianos al oeste, la Valduerna y la Valdería al este y al norte la mejor de las vistas, ya que desde el Teleno se pueden divisar los montes de Laciana, Babia y los Montes de León. En la misma cumbre, nos tomaremos un merecido descanso para contemplar el pueblo de Corporales en el fondo del valle y pensar en nuestro itinerario de vuelta. En esta época del año las moscas y mosquitos no suelen dar tregua si no hace viento y el día es caluroso.

Vistas desde el pedregal de Pico Teleno de León

Las espectaculares vistas desde la cima.

Otras rutas para ascender al Pico Teleno son desde el alto del puerto del Morredero siguiendo la cresta en dirección este; desde Molinaferrera por su cara sur, e incluso, desde Tabuyo del Monte para atreverse con un trekking exigente, largo y con fuerte desnivel. La nuestra, conocida como la Ruta Mascariel, propone un recorrido lineal de 8,75 kilómetros, cinco horas de duración de ida y vuelta y dominando un desnivel de unos 900 metros hasta coronar los 2.188 del Teleno, la montaña sagrada de los astures. Esta tribu concedió a esta cumbre el nombre de su dios guerrero, Tilenus, a quien se hacían sacrificios de machos cabríos, caballos e incluso de prisioneros. ¿Por qué está montaña?

Al tener orientación oeste, es un referente para las puestas de sol.

De los picos más importantes de la zona, el Teleno era el único que tenía orientación oeste por lo que se convirtió en un referente para la observación de la puesta de sol, de la evolución estacional y de la observación climatológica. El reciente hallazgo de numerosos petroglifos en la Maragatería, en lugares con una buena visibilidad del Teleno, sugieren que el monte pudo haber sido lugar de referencia en la observación astronómica. La llegada del Imperio Romano a la zona daría lugar a un sincretismo religioso, o a la unión de los dioses grecorromanos con los indígenas como en este caso: Mars Tilenus. Según Estrabón, esto está documentado a través de una inscripción encontrada en una lámina de plata en Quintana del Marco, con el nombre Marti Tileno, así como en las estelas funerarias indígenas de Astorga (Asturica Augusta), uno de los antiguos poblados más importantes de esta tribu prerromana.

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