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El Matadero es la apuesta cultural más fuerte de Madrid Río.

Planes alternativos en el centro Madrid

La ciudad reinventada: más allá de las tapas y la noche madrileña

Actualizado: 27/11/2020

Muchos factores hacen que sea necesario replantearse las actividades al aire libre en Madrid con las restricciones por el covid-19. La escasa oferta, los horarios limitados y el aforo controlado son algunos de los hándicaps. Si a esto le añadimos la intención de gastarnos poco dinero y de evitar al máximo el contacto con los que no sean familiares cercanos… ¿qué se puede hacer? Pues en primer lugar, echar mano de la imaginación y en segundo, sacar ganas de hacer cosas nuevas y diferentes.
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A pesar de las limitaciones. Madrid puede ser un buen lugar para divertirse con poco dinero en el bolsillo y sin poner en riesgo la salud propia y la de los demás, manteniendo siempre las normas sanitarias establecidas: paseos en bici, escape rooms por el centro, rutas guiadas al aire libre, paseos por parques urbanos, búsqueda de tesoros… En definitiva, múltiples y apetecibles actividades de las que aquí van unos ejemplos.

los jeronimos y ampliacion del museo del prado
Una parada sobre ruedas frente a los Jerónimos y la ampliación del Museo. Foto: Alfredo Cáliz

1. La ciudad a pedales

En otoño los colores de la ciudad cambian. Los árboles adquieren una tonalidad amarillo-rojiza que dan al ambiente un aire romántico… ¿Y cuál es una buena forma de disfrutar del paisaje? Pues si el tiempo lo permite, caminando o en bicicleta. Bicimad es asequible y cuenta con múltiples estaciones donde coger o dejar uno de los vehículos de dos ruedas. En Internet hay variedad de rutas y planos para descargarse y estudiar cuál es el camino que más interesa o apetece hacer.

El Ayuntamiento de Madrid ofrece la Red de Vías Ciclistas, donde destacan el Anillo Verde Ciclista y las Rutas Turísticas y de Ocio. En ellas hay interesantes propuestas, pero no son las únicas. Los que se mueven en bici en sus trayectos diarios consultan En bici por Madrid, una web donde los ciclistas madrileños cuentan experiencias, dan consejos y debaten sobre la movilidad en la capital. Este blog cuenta con una recopilación de mapas de Madrid y del área metropolitana para imprimir, editados en papel, para descargar en el smartphone, o para consultar online.

Paseo con Madrid al fondo y ciclistas.
Sin subir hasta muy alto también se encuentran buenas vistas. Foto: Hugo Palotto.

2. Aventuras a cielo abierto

Los street escape se diferencian de los escape room en que estos últimos se desarrollan en varias habitaciones y los primeros, al aire libre. Esto tiene como ventajas descubrir rincones interesantes de la ciudad donde se realiza y además, estar en espacios abiertos por lo que la incidencia del virus es menor. El objetivo depende de la historia que se desarrolle, que puede ser de lo más variopinto, como descubrir algún elemento robado o encontrar un personaje. Por ejemplo en Persigue al Asesino, de 'Escape The City', los participantes tienen que descubrir quién es el asesino de Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel.

Una alternativa pandémica a los 'escape rooms'. Foto: Escape the City y Monkey Donkey.
Una alternativa pandémica a los 'escape rooms'. Foto: Escape the City y Monkey Donkey.

Esta aventura arranca en la Puerta del Sol y a lo largo del recorrido los participantes reciben evidencias y pistas de las últimas veces que fue visto en la vía pública de Madrid. Pandemic está organizado por Mappo y este juego tiene mucho que ver con los momentos que estamos viviendo, ya que trata sobre un virus que está diezmando a la población del planeta y expertos de todo el mundo se unen en busca de una vacuna, pero necesitan encontrar los códigos de anticuerpos neutralizantes. Mientras que el street scape KGB Misión Madrid de 'Monkey Donkey' convierte a los participantes en espías de la Guerra Fría. Una misión a contrarreloj por la ciudad descubriendo lugares secretos y compartiendo divertidas pruebas con estrafalarios personajes por medio.

3. Descubrir estatuas

Madrid cuenta con muchos habitantes silenciosos que, la mayoría de las veces, pasamos por su lado sin darnos cuenta. Hay piezas especiales como la única escultura urbana de Dalí, concretamente el conjunto escultórico conocido como Dolmen de Dalí, situado en Goya. El monumento es un homenaje a Isaac Newton con el que el artista quería simbolizar los esfuerzos de la humanidad por desafiar a la gravedad. Muchas de estas estatuas son de figuras anónimas que embellecen la ciudad y, en algunos casos, la representa, por ejemplo, El Vecino Curioso, de Salvador Fernández Oliva, situada encima de las vallas de la Iglesia de la Almudena; El Barrendero de la Plaza de Jacinto Benavente; la Joven bailando, a la entrada de la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de la calle Palma o la Joven estudiante que se apoya en la pared de la calle Pez esquina con San Bernardo.

angel caido retiro
Aquí el del Retiro, en mano del lector encontrar los demás. Foto: Alfredo Cáliz.

Se pueden descubrir muchas más, como la conocida como Estatua de la Libertad madrileña, que es incluso anterior a la neoyorquina, colocada en el Panteón de Hombres Ilustres, o a la estatua que se reconoce popularmente como El otro Ángel caído pero que nada tiene que ver con el Lucifer que se encuentra en el Parque de El Retiro. Esta imagen que representa a un hombre alado que se ha dado de cabeza contra el edificio situado en la esquina entre las calles Mayor y Milaneses, se titula Accidente aéreo y es obra de Miguel Ángel Ruiz Beato. Los animales son también protagonistas de estatuas curiosas, como la que rinde homenaje al perro callejero y está colocada a las puertas del Zoo de Madrid, o a la llama firmada por J.M. Palma instalada ante el Edificio Lima levantado en el Paseo de la Castellana en 1965.

4. Leer y reciclar

Las semanas de confinamiento han dado mucho tiempo libre para dedicarlo a la adictiva lectura. Pues si hay algo que engancha más que leer es pasear por las múltiples librerías de viejo que hay en Madrid y husmear en sus cajones con atractivos títulos y precios reducidos. Uno de los puntos calientes de los libros de segunda mano es la Cuesta de Moyano, muy cerca del Jardín Botánico y del Parque de El Retiro por lo que, si hace buen tiempo, se puede ir al pulmón verde madrileño y empezar a leer algunas de las flamantes adquisiciones. El histórico mercadillo, coronado por una estatua de Pío Baroja, cuenta con 30 casetas y abre todos los días de la semana. También hay tiendas específicas como la librería 'Pérez Galdós' en Hortaleza, 5; la entrañable librería 'San Ginés', en el pasadizo del mismo nombre; o 'La Tarde Libros', en la calle Ruiz, 15. Y por supuesto, no se olviden limpiarse las manos con gel hidroalcohólico.

Hay muchos más pero el eterno sitio donde empezar la ruta de librerías de viejo: la Cuesta de Moyano. Foto: Shutterstock.
Hay muchos más pero el eterno sitio donde empezar la ruta de librerías de viejo: la Cuesta de Moyano. Foto: Shutterstock.

5. Ruta de arte urbano

No hay nada como calzarse unas deportivas y echarse a andar en un luminoso día otoñal. Buscar algunos de los mejores grafitis de Madrid puede ser muy agradable y siempre podemos hacer unos selfies modernos ante paredes llenas de color, por ejemplo, en la calle Fuencarral está el mural de Artez, un artista que recurre con frecuencia a figuras femeninas, libros y motivos vegetales; los muros del edificio de Tabacalera suelen estar pintados con murales de diversos estilos, es más, cuentan con El Keller, un taller de street art para todo aquel que quiere iniciarse o mejorar su técnica con el spray. Pero también se pueden visitar barrios enteros como Lavapiés, donde cada verano se celebra C.A.L.L.E., el festival de Arte Callejero más potente de la capital o Tetuán, donde se pueden ver obras de Suso33, Borondo o El Rey de la Ruina.

Calle Nuestra Señora del Carmen, con la Calle Hierbabuena. 'Compartiendo muros', de La Antigua y Elena Vacas.
Fuera del centro también hay sitios interesantes. Foto: César Cid.

6. Flora de asfalto

J. Ramón Gómez Fernández es cofundador del estudio de paisajismo 'Herba Nova', donde desarrolla diseños de zonas verdes en entornos urbanos y estudios de arbolado. Gómez es amante de todo aquello verde que surge espontáneamente en el bordillo de la acera o debajo de un banco. En los múltiples talleres que imparte en destacados centros culturales, el paisajista anima a todos aquellos que les gusten las plantas a fotografiar e identificar todos aquellos ejemplares de flora espontánea que van apareciendo en nuestros paseos.

Cuando un jardín te calma las ganas de viajar. Foto: Alfredo Cáliz.
Cuando un jardín te calma las ganas de viajar. Foto: Alfredo Cáliz.

7. Un paseo con rollo

Antes de la pandemia era muy frecuente ver a grupos de turistas, liderados por un guía, parándose en puntos clave de la ciudad, donde soltaba su discurso en diversos idiomas, pero ahora es muy habitual ver a madrileños disfrutando de una visita o de un paseo cultural guiado porque hay temas para todos los gustos, por ejemplo, El Madrid de los espías, que evoca historias y lugares de conspiraciones y de intrigas, Mujeres del siglo XX, un repaso de las féminas que hicieron historia como las famosas Sinsombrero. Ambas están disponibles en 'Carpetania'. 'Visitamadriz' cuenta con salidas de temáticas tan diversas como Los fantasmas de Madrid, la Guerra Civil Española, la Casa de Campo o el Madrid Masónico. Casi todas estas rutas comentadas cuestan 10 euros pero también las hay gratis, aunque siempre está bien dar una propinilla al guía al final de la visita. En 'Freetour' hay salidas tan interesantes como Inquisición Española, el Barrio de las Letras, Neoclásico colosal o Madrid multicultural. Solo hay que ponerse la mascarilla y unas cómodas deportivas para caminar.

monumento elena fortun madrid
Elena Fortún fue una de las sinsombrero. Foto: Elena Buenavista.

8. Con el 'smartphone' en la mano

El geocaching consiste en esconder y encontrar tesoros con la ayuda del GPS del móvil. De esta forma, dar un paseo por la ciudad puede convertirse en una divertida gymkhana. Para empezar, sólo hay que crear una cuenta en la plataforma Geocaching para ver el mapa de los geocachés cercanos (o sea, los sitios donde hay guardados alguno de los tesoros), encontrar el objeto, volver a guardarlo (o poner otro del mismo valor) en el mismo sitio donde se encontró para que otro participante pueda encontrarlo. Por último, hay que escribir sobre la experiencia en el blog de la aplicación.

Una manera entretenida de mezclar tecnología y realidad. Foto: Shutterstock.
Una manera entretenida de mezclar tecnología y realidad. Foto: Shutterstock.

9. Andar es salud

'Walking People' (o Gente que Camina) es un proyecto europeo que tiene como objetivo promover la actividad física de la ciudadanía, generando un entorno adecuado y sencillo para caminar por la ciudad. Son trayectos perfectos para realizar en solitario, con el perro o con familiares y amigos, e indicados para todas las edades y condiciones físicas ya que se realizan al ritmo de cada uno. El Proyecto WAP ofrece 2 rutas en el centro y 16 en los distritos periféricos.

Dejar la ciudad atrás con solo dos paradas de metro.
Para andar hasta cansarte rodeado de vegetación no hay duda: la Casa de Campo. Foto: David Fernández.

Para facilitar la información sobre estas caminatas, hay paneles informativos donde se incluye, además de un plano, la información esencial de la ruta y las tablas de velocidad y de consumo calórico. Entre los trazados, se encuentra el que va entre el Parque Roma y la Casa de Campo pasando por Madrid Río; o el que discurre entre la Plaza de Castilla y el Parque Tierno Galván. Y también son interesantes la Ruta de Arganzuela, que se inicia en el Paseo de Yeserías y transcurre por Madrid Río, o la de Salamanca-Retiro, que comienza en Núñez de Balboa esquina a la calle Hermosilla. Lo único que hay que hacer es llevar algo de avituallamiento, calzarse unas botas abrigadas y… ganas de caminar.