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Infórmate siempre si en tu lugar de destino permiten el acceso a animales de compañía. En algunos hoteles solo permiten el acceso a perros de no más de diez kilos. Pero no sufras… en este artículo que publicamos en esta misma sección tienes un recopilatorio de hoteles "big dog friendly":
Ten siempre a mano el teléfono de un par de veterinarios de la zona a la que viajas, al menos uno con servicio de urgencias, por lo que pueda pasar. No olvides llevar contigo toda la documentación de tu mascota y tener anotado si tiene algún tipo de alergia a medicamentos o alguna otra información relevante en caso de accidente. En el caso de tomar medicación, lleva todas las dosis que vas a necesitar e incluso alguna extra por si tuvieras algún problema.
Lleva algunas raciones de su comida y ten localizadas algunas tiendas donde poder comprar más en caso de que se te acabe, sobre todo si tu mascota tiene que seguir alguna dieta especial. Evita los cambios de alimentación.
Identificación. Aunque tenga chip, en caso de pérdida es muy útil una chapita identificativa con tu nombre y número de teléfono. Para perros y gatos existen collares con localizadores GPS. Si van en bodega, en jaula, etc… puedes poner una etiqueta en la misma con tus datos.
Medio de transporte. Si no viajas en tu coche, consulta la normativa. Hay servicios de transporte que solo permiten viajar al lado de sus humanos a animales con un determinado peso; de lo contrario viajarán en bodega. Ten mucho cuidado y asegúrate de que el lugar en el que viajará tu compi no humano tiene una temperatura adecuada, es seguro y está vigilado. Si el viaje es largo, deberían permitirle beber agua o tener un recipiente para este fin. Ideal ya sería que tú pudieras ir a comprobar cómo se encuentra.
Perros y gatos: pueden ir en transportín (los pequeños detrás de los asientos en el suelo, en sentido opuesto a la marcha y los grandes en el maletero), o bien, en el caso de los perros, con un arnés específico enganchado al cinturón de seguridad. Recuerda acostumbrar antes a tu gato/perro a entrar en el transportín. En este vídeo puedes ver cómo hacerlo. No lo dejes para el momento del viaje; entrena primero.
Conejos, cobayas, hámsteres, ardillas, jerbos, pájaros... Puedes llevarlos en su misma jaula, pero no los pongas con las maletas. Intenta que vayan en un espacio bien ventilado, pero sin corrientes de aire. Vigila el climatizador de tu coche en especies sensibles a los cambios de temperatura. Y súbelos al coche justo antes de salir, procura manipular la jaula lo menos posible y sin brusquedad. Algunos pájaros viajarán más cómodos si cubres la jaula con una tela. Asegúrate de que el tiempo que van a pasar enjaulados no es demasiado y les produzca estrés.
Terrarios y acuarios. Los recipientes con agua corren el riesgo de volcarse. Los terrarios y acuarios pueden necesitar una temperatura determinada, lo que complica bastante su transporte. En este caso lo ideal sería que no tuvieran que viajar; en caso contrario consulta a un especialista en el tema y asegúrate de que tu coche cuenta con todos los medios necesarios para garantizar que no haya accidentes.
En cualquier caso, puedes hacer algunos viajes cortos de ensayo en el coche y valorar cómo se encuentra tu mascota antes de emprender el viaje en sí.
Los pájaros pequeños se estresan muchísimo en los viajes. Si puedes dejarlos al cuidado de algún familiar, mucho mejor. En el caso de que sean pájaros grandes tipo guacamayo o cacatúa, dejarlos en casa no es la mejor opción, ya que pueden sufrir ansiedad por separación. Hay un excelente artículo de Mascoteros con información detallada acerca de viajar con pájaros.
Gatos: También suelen estresarse al ir a lugares nuevos, tenlo en cuenta. No olvides llevar su arenero y arena limpia para cambiarla. Deja el arenero alejado del lugar donde comerá y descansará y quita del medio los objetos susceptibles de romperse. A los gatos les encanta jugar con todo lo que encuentran. Lleva juguetes para que no caiga en la tentación de romper algo en el hotel! Puedes llevar asimismo un difusor de feromonas antiestrés (por ejemplo, feliway), que le ayude a adaptarse al nuevo destino. Deja cerradas puertas y ventanas para evitar que por miedo salte y se pierda.
Un último consejo. Si viajas con tu mascota intenta dedicarle el tiempo que necesite, no hagas que viaje en vano y pase la mayor parte del tiempo desatendido.
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