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Qué ver en Tenerife en dos días

Tenerife, de la playa a las estrellas

Actualizado: 30/04/2016

La capital de la isla, Santa Cruz de Tenerife, tiene uno de los mejores carnavales del mundo. Playas del fin del mundo y bosques prehistóricos en la península de Anaga. Y una vecina, San Cristóbal de la Laguna, que es Patrimonio de la Humanidad. Si todavía queremos más, podemos subir al Teide y, desde sus 3.718 metros, ver y casi tocar las estrellas.
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Itinerario para visitar Tenerife en 2 días

Primera mañana: Arte a cañonazos

9.30La Cruz de la Conquista 

En 1500, seis años después de que Castilla se lanzara a la conquista de Tenerife, empezó a construirse la que, andando el tiempo, sería la iglesia de la Concepción, una de las más queridas de los tinerfeños y, después del templo homónimo situado en La Laguna (que también vamos a visitar), la parroquia más antigua de la isla. Su elemento más representativo es la estilizada torre, que data de casi tres siglos después de su edificación (1786). En su interior destaca la Cruz de la Conquista, que el adelantado Alonso Fernández de Lugo bajó con sus propias manos al desembarcar en la isla en 1494. Los vecinos, como muestra de cariño y reconocimiento, se refieren al lugar como la catedral de Santa Cruz, pese a que no es una catedral ni una basílica. La catedral de la diócesis de Tenerife es la de La Laguna.

La iglesia de la Concepción, uno de los templos más queridos por los locales. Foto: Shutterstock.
La iglesia de la Concepción, uno de los templos más queridos por los locales. Foto: Shutterstock.

10.30Arquitectura y arte contemporáneos

Cruzamos el puente del Cabo. Mirando al frente descubrimos el Museo de la Naturaleza y El Hombre (que vamos a visitar mañana) y, a la derecha de éste, Tenerife Espacio de las Artes (TEA). Lo primero que llama la atención son las 1.200 piezas acristaladas, casi todas de diferentes tamaños y formas, que salpican la fachada diseñada por los famosos arquitectos suizos Herzog & de Meuron, junto con el canario Virgilio Gutiérrez Herreros. El lugar juega con rampas y ambientes abiertos que difuminan la frontera entre el espacio público y el privado, presentándose como una invitación para adentrarse en sus salas. La oferta cultural del TEA se basa en un programa de exposiciones temporales y actividades destinadas a atraer al mundo del arte a público no especializado, generando curiosidad y reflexión. Su sala de cine independiente, de autor y documental es una de las grandes aportaciones a la escena cultural de la isla.

12.30El Tigre que dejó manco a Nelson 

Los mismos arquitectos que diseñaron el TEA se ocuparon de la remodelación de la plaza de España, a la que llegamos en cinco minutos por la avenida de San Sebastián y tirando a la izquierda por Bravo Murillo. En 2006, durante las obras en la plaza, aparecieron las ruinas del castillo de San Cristóbal, que formó parte del sistema defensivo de Tenerife desde 1575 hasta su derribo en 1928. Una galería subterránea permite visitar sus restos en el Centro de Interpretación Castillo de San Cristóbal. En una sala especial, vemos la joya del centro: el mítico cañón Tigre, el que dicen que arrancó el brazo derecho al almirante Nelson cuando, en 1797, intentó invadir la isla. Es un cañón de bronce del siglo XVIII, fundido en Sevilla, de unos tres metros de largo y dos toneladas de peso.

El Castillo de San Cristóbal en la plaza de España. Foto: Shutterstock.
El Castillo de San Cristóbal en la plaza de España. Foto: Shutterstock.

Si nos interesa profundizar en la historia bélica de la isla, podemos acercarnos al cuartel de Almeida (a diez minutos de la plaza de España, por la calles de la Marina y Arquitecto Marrero Regalado), donde está instalado el Museo Militar Regional. Allí veremos otro cañoncito, el Hércules, que fue forjado en Flandes en el siglo XVI, de casi cinco metros y más de 3.500 kilos.

Primera tarde: De los dragos a la playa

14.00Japonés, vasco y canario

Un paseo de diez minutos separa la plaza de España de 'San Sebastián 57' (1 Sol Guía Repsol 2020). El chef Alberto González es el encargado de ofrecer platos sutiles y tradicionales, como el solomillo de vieiras y el micuit de foie y almendra. También por la zona se encuentra 'Kazan' (2 Soles Guía Repsol 2020), restaurante de cocina japonesa de autor. Otra buena opción es 'Clavijo Treinta y Ocho', donde degustaremos platos con un toque vasco.

16.00Jardín botánico y escultórico

Construido en los años 20 del pasado siglo, el parque García Sanabria es un auténtico jardín botánico donde se puede pasear atravesando pasadizos de bambúes chinos, leer bajo una palmera canaria o recostarse en un drago aspirando el perfume de las distintas flores tropicales. Salpican el parque numerosas esculturas contemporáneas, procedentes de la Primera Exposición Internacional de Esculturas en la Calle, celebrada en el invierno de 1973-1974. Obras de Moore, Gaudí, Chirino, Paolozzi, Torner…, pueden verse aquí, en la vecina rambla de Santa Cruz y en otros parques y plazas de la ciudad. Se puede aprovechar también para conocer la cercana plaza 25 de Julio, o de los Patos, con su réplica de la fuente de las Ranas del sevillano parque de María Luisa y sus bancos de azulejos con publicidad de las empresas que patrocinaron la construcción de esta glorieta a comienzos del siglo XX.

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El pulpo a la parrilla con espuma de papa negra en 'San Sebastián 57'. Foto: Rocío Eslava.

17.00Un café largo de cultura 

Nuestro siguiente destino es la iglesia de San Francisco de Asís. En diez minutos desde la plaza 25 de Julio (por las calles Viera y Clavijo, Pérez Galdós y Villalba Hervás), llegamos a este bello ejemplo del estilo barroco insular (su fachada actual data de 1777), cuyo antiguo huerto es hoy la vecina plaza del Príncipe. Dentro nos fijamos en una curiosa talla del Señor de las Tribulaciones, que está hecha de pasta de maíz y se cree que vino de Sudamérica; y en el retablo central, una joya del barroco. Antes o después, nos podemos pasar por el Círculo de Bellas Artes a tomar un café y echar un ojo a las exposiciones.

18.00La playa sahariana de las Teresitas

Aprovechamos que el sol aún calienta, pero ya no aprieta, para relajarnos en las reputadas playas tinerfeñas. A ocho kilómetros del centro, por la TF-11, se hallan el barrio de San Andrés y la playa más popular de Santa Cruz, la de las Teresitas, de arena fina y dorada (traída del Sáhara) y aguas cristalinas y calmas, que relajan nada más verlas.

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'La Caleta de los hippies', en Adeje, es una de las playas más paradisíacas de la isla. Foto: Yanira Quintero.

21.00Cocina canaria de mercado

En el camino de vuelta a Santa Cruz, se puede cenar a las mil maravillas en 'La Posada del Pez' (Recomendado Guía Repsol 2020). Aquí Carlos Fresco idea una cocina canaria con toques asiáticos donde se aconseja pedir cherne con papas arrugadas y mojo. También Recomendado por Guía Repsol en 2020 y en este caso ya en la capital, 'El Coto de Antonio'.

22.00Diversión en la Noria

Merece la pena volver a la plaza de España a esta hora, cuando la impactante fuente central y todo el espacio que la rodea se iluminan, proporcionando un espectáculo realmente llamativo. En cinco minutos, por General Gutiérrez, Imeldo Serís y Candelaria, nos plantaremos en la calle Antonio Domínguez Alfonso (más conocida como la Noria, por la que se instalaba aquí antiguamente), donde se concentra la animación nocturna. En la calle Clavel hallaremos locales más alternativos, como 'Banda Aparte'.

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El tartar de gambas, uno de los platos estrella de 'La Posada del Pez'. Foto: Rocío Eslava.

Segunda mañana: Lecciones de naturaleza

9.30Con motitas sabe mejor

La segunda mañana en la capital tinerfeña se puede dedicar a conocer un poco más sobre el producto canario por antomasia: el plátano. Existen varias fincas plataneras que organizan rutas guiadas. 'Las Margaritas', 'Las Musas', y 'La Calabacera' son algunas de ellas. Y como plan más urbano: el Museo de la Naturaleza y el Hombre. Canarias, mucho antes de ser un paraíso para los turistas ya lo era para los naturalistas y los científicos. Darwin, Humboldt, Verneau, Lyell y Berthelot, entre otros, realizaron expediciones a las islas durante los siglos XVIII y XIX, encontrando en ellas un verdadero laboratorio bioantropológico. El museo está ubicado en el antiguo Hospital Civil, una de las más bellas arquitecturas neoclásicas de las islas.

11.30Colores y sabores locales

En dos zancadas, rodeando el museo y el vecino TEA, nos ponemos en el Mercado de Nuestra Señora de África La Recova, un bonito edificio neocolonial (1943) de dos plantas, con patio central, que es el lugar idóneo para adquirir productos típicos de la isla (papas negras, vinos, ron…) y conocer el ambiente y el auténtico sabor de la ciudad.

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Un paseo por la finca de 'Las Margaritas'. Foto: Salvador Aznar.

12.30Playas del fin del mundo

El municipio de Santa Cruz abarca gran parte de la península de Anaga, el extremo nororiental de Tenerife, un macizo de cumbres recortadas, profundos barrancos, costas acantiladas y playas del fin del mundo, a las que no siempre resulta fácil llegar. El Parque Natural de Anaga es una buena elección para asomarse a ese Tenerife salvaje.

Una vez más, si no nos apetece salir de la ciudad, podemos dedicar las últimas horas de la mañana a visitar el Auditorio de Tenerife, construcción emblemática de Santiago Calatrava, cuyas formas vanguardistas recuerdan una ola gigantesca saltando desde el mar. Las visitas suele ser guiadas y con cita previa. A 400 metros del Auditorio, se halla el Recinto Ferial, obra también de Calatrava, donde tienen lugar algunos de los actos más sonados del Carnaval, como los concursos de murgas o la elección de la reina.

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La historia de la ciudad puede entenderse a través de la evolución de los trajes carnavaleros. Foto: Salvador Aznar.

Segunda tarde: Descubriendo La Orotava

14.30La cocina de las abuelas canarias

La última tarde del viaje es buena idea acercarse al pequeño pueblo de La Orotava, un pequeño municipio a una hora en coche de Santa Cruz de Tenerife. Pero antes, toca desviarse a San Cristóbal de La Laguna para comer en 'Silbo Gomero' (Recomendado Guía Repsol 2020), uno de los mejores sitios para probar los sabores de las abuelas canarias. Carpacho de vaca basta, tomillo, limón y queso gomero curado y lomo de bacalao confitado con consomé de camarón soldado son algunos de los platos de Braulio Simancas. Y todo con panes de '100% pan y pastelería'.

Ragú de aguja de vaca basta al listán negro y tofe de cebolla.
Ragú de aguja de vaca basta al listán negro y tofe de cebolla. Foto: Rocío Eslava.

16.30Cerámica exclusiva y vinos de familia

Es en La Orotava donde se encuentra el taller del artesano ceramista Gonzalo Martín. A pesar de su exclusividad, tiene piezas ecónomicas –desde 5 euros– y trabaja en las vajillas para chefs tan reputados como Martín Berasategui, los hermanos Roca o David Muñoz. Y si apetece un poco de enoturismo: 'Bodegas Tajinaste', donde se elabora uno de los mejores caldos de todo el archipiélago

18.30La vida de ruta la vida mejor 

Los que aún tengan fuerzas para seguir exprimiendo Santa Cruz de Tenerife y sus alrededores, pueden elegir un par de puntos de las dos rutas que proponemos: la de miradores y la de templos. El Mirador de Ortuño, El Teide y la Punta del Teno son algunos de los lugares con miradores que brindan panorámicas inolvidables, lugares donde sacar la cámara y quedarse un rato contemplando. Y en cuanto a lugares de culto impactantes: Nuestra Señora de Begoña, el Santísimo Redentor o Stella Maris son tan solo tres de ellas. Da igual cuántas insignes catedrales hayas visitado, es difícil haber visto algo parecido.

La variedad cromática no falta en el taller.
La variedad cromática no falta en el taller de Gonzalo Martín. Foto: Rocío Eslava.

 21.00¿Guachinche o chiringuito?

Ya es momento de despedirse de Santa Cruz de Tenerife y, no muy lejos, se pueden encontrar una notable variedad de guachinches, como 'Zacatín' o 'Las Galanas', los dos en la localidad de Santa Úrsula. Es un tipo de establecimiento que solo se puede encontrar en Tenerife y que dista muy poco de comer en el salón de una casa típica canaria. Si se prefiere optar por comer frente al mar, también existen múltiples chiringuitos, por ejemplo, en la Playa de las Américas.