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Empezamos el día con Nacho Solana, chef del restaurante de Ampuero con 2 Soles Guía Repsol que lleva su apellido, en la cafetería y pastelería ‘Gómez Fusión’ (Paseo de Pereda, 21). “Su emparedado de hojaldre caramelizado es una de mis debilidades para arrancar bien la mañana”, confiesa sobre un negocio que lleva abierto en la capital cántabra desde 1860. Mucho más joven, de 2020, es ‘Amarella Café’ (Calderón de la Barca, 15), la propuesta de Jesús Sánchez para desayunar donde, según el cocinero de ‘El Cenador de Amós’, "destaca su café y el bizcocho que preparan”.
A la hora del aperitivo, tienen suerte los que están en Liérganes porque pueden dejarse caer por ‘DouGall’s’ (B. de la Vega, 51), una cervecería con su propia marca de cerveza artesana. Tras más de 20 años de trayectoria en Cantabria, Jesús Sánchez la recomienda a Guía Repsol. También es el cocinero de ‘El Cenador de Amós’ quien comparte la siguiente dirección. Cuando asoma el mediodía abre el mítico ‘Solórzano’ (Peña Herbosa, 17) en Santander: en torno a cien tipos distintos de vermut, tradicionales caracoles o rabas de peludín para degustar en la barra de azulejo y mármol.
Las rabas de peludín de 'Solórzano', un 'must' del aperitivo santanderino. Foto: Sofía Moro
El hambre comienza apretar y para algo rápido pero rico, los cocineros cántabros proponen dos opciones, una en Camargo y otra en la capital. las hamburguesas de carne ecológica de raza Tudanca entre panes de masa madre de ‘The Duke’s’ (Menéndez Pelayo, 3. Muriedas) son “una apuesta segura” para Nacho Solana. Por otro lado, Jesús Sánchez se acuerda de las de ‘La Carnaza’ (Casimiro Sainz, 11), que también tiene elaboradas raciones para compartir, como la lechuga viva de anero -con bonito del norte Catalina- o las Bravas New School, con torreznos y alioli.
Quien cuente con tiempo para sentarse a comer tiene que apuntar tres pueblos: San Roque de Riomera, Penagos y Ruesga. En el primero se encuentra ‘Casa Vicente’ (La Plaza, s/n), donde acude Borja Marrero (‘Muxgo’, 1 Sol Guía Repsol) por “el bistec, las papas con carne, el cocido y sus croquetas”. En el segundo, muy cerca de Cabárceno, Jesús Sánchez nos señala ‘La Yerbita’ (Dueso, 3), en Ruesga, “los hermanos Gómez se dedican en cuerpo y alma al negocio de sus padres, y atienden como nadie”. Nos lo contó Nacho Solana; esta “casa de de comidas tradicional exquisita” se llama ‘Casa Tomás’ (Barrio La Cotera s/n).
En cuanto a restaurantes en la capita cántabra es Sánchez quien toma la palabra: la “fusión cantabrizada” de Emilio Gutiérrez en ‘La Malinche’ (Hernán Cortés, 41), la carta corta y fiel a la temporada de ‘Querida Mar’ (Avenida Manuel García Lago, 1) o el pastel de cabracho que sirve Ramón Cruz en ‘Mesón Gele’ (Eduardo Benot, 4) son algunas de sus paradas fetiche. En este último os podéis dejar llevar por la curiosidad vinícola, ya que se pueden encontrar más de 1.200 referencias, siempre acompañadas de su mítica tapa de patatas con cebolla.
“Pescados salvajes, carne cántabra y picoteo” es lo que propone ‘El Puntal Tricio’ (Calle del Puntal) en Ribamontán al Mar, justo enfrente de la costa de Santander; para Francis Paniego se trata de un “lugar paradisiaco”. Otro sitio realmente privilegiado se encuentra en la ría de Mogro, en ‘Avrile’ (Abra del Pas) se puede disfrutar de “los ingredientes locales y la paz de la ría” desde la hora del desayuno hasta la cena con espectáculo, pasando por el brunch los fines de semana, la comida y las placenteras sobremesas.
Un rico picoteo frente a la ría de Mogro. Foto: Facebook 'Avrile'
Jesús Sanchez todavía cuenta con más recomendaciones de terrazas con buena mesa, como ‘El Cazurro’ (Bo. la Arnía, s/n) de Piélagos, con sus pescados del día escritos en la pizarra, sus suculentos fuera de carta y su panorámica de infarto. Y, para tomar una copa o un refrigerio con vistas a la Playa de la Magdalena, no hay duda: ‘BNS’ (Avenida de la Reina Victoria, 46).
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/07.RestSol.jpg.transform/rp-rendition-lg/image.jpg "Los arroces que te harán peregrinar a Cala Saona")
